El amor en los tiempos de Facebook
En una era digitalizada como la nuestra, con amores en 3D y
sexo telefónico, no resultará raro lo que tengo que confesar. Confesar, qué
palabra. Propia de un crimen. Podría ser cursi y decirles que mi crimen es
quererlo y que sufro la agonía del que fue atrapado y encarcelado por eso; y a
decir verdad, el amor es un poco así, que te atrapen y te encierren. Porque
tanto para bien como para mal… en fin.
Si yo dijera esto en otro momento, tal vez unos cuantos años
atrás, o mismo en otro siglo, sería todo tan sacado de contexto que enseguida
vendrían a encerrarme… pero en un loquero. Todo depende del contexto, y cuando
no depende del contexto es precisamente a causa del contexto. Supongo también
que para entender lo heroico del Cid Campeador tendría que conocer a la España
de ese siglo y a todo lo que ellos creían heroico, de otra manera solo me
parecería un bárbaro.
Así que, vuelvo a pedirles que me entiendan cuando les digo
que enloquezco como si fuera gran cosa cada vez que él pone Me Gusta en una
publicación mía. Subo una foto y enseguida pica al Me Gusta, entonces yo cierro
los ojos, y es como si me dijera “linda, ¿me sentís? ¿Me estás sintiendo?” y
los abro con una sonrisa estúpida en los dientes, porque no ocurre en los labios,
ocurre desde los dientes, hasta que me es imposible tenerlos dentro de mí
cavidad bucal y la boca se abre.
Disfruto de acosarlo porque, en esta era moderna y
tecnológica, ya no vale la pena acecharlo en la puerta de su casa ni
perseguirlo al trabajo, a la antigua. En esta era moderna puedo saber a qué
hora se conectó y hace cuánto estuvo conectado. Abro los mensajes privados todo
el tiempo, al menos dos o tres veces por hora y veo que ahí estuvo hace un
escaso minuto y enseguida me pregunto con quién demonios habló. ¿Está hablando
con otra chica? ¿Le está poniendo me gusta a sus malditas publicaciones, o eso
sólo lo deja reservado para mí? ¿Está siendo encantador con ellas? A mí me dice
que soy bonita, que soy linda, me dice dulce y la última vez que lo vi me
acarició la mano dos (¡dos!) veces. Soy especial. Lo sé. A mí me quiere más.
Por supuesto que mi amor no estuvo conectado hace un (escaso) minuto revisando
su muro de inicio, ni tampoco hablando con amigos, porque sabemos muy bien que
con los amigos no hablamos tanto tiempo seguido. Entonces, cada vez que lo veo
conectado hasta las seis de la madrugada, y no está hablando conmigo, entiendo
que es con otra. ¿Esa otra, lo hará reír como yo? ¿Le contará mis chistes?
¿Tendrá un lunar marrón bien grande justo en la parte de atrás de su pierna
como yo? ¿Tendrá mí mismo lunar, ese que tengo en el costado de la boca? ¿Se
sacará toda la ropa?
Pero yo sé que yo soy especial. Lo sé. A mí me quiere más.
Quiero explicarle que conmigo el amor no significa un grillete
en el tobillo y una piedra que arrastrar, que no voy a llevarlo a mis reuniones
familiares y que no voy a presentarle a mamá. Tampoco voy a hacer que se fume a
mis amigas ni voy a exigirle que recuerde nuestros cumple mes. No quiero tener
hijos y no quiero que me llene de regalos. No quiero que me cante serenatas ni
que me regale música de mierda.
¿Esa es la puta a la que también le pusiste Me Gusta? ¿Me
vas a explicar vos quién demonios es, o voy a tener que hacer toda una
investigación cibernética?
Voy a buscar algo para tomar, y para comer; y, por cierto
¿quién demonios se puede llamar Eleaonor? Si vas a engañarme, ¿no podría ser
mejor con alguien que se llame, no sé, María?
Vos y tus mendigos Me Gusta…
Los MG nos cagan y nos alegran la vida. He llegado a reflexionar acerca de eso en este minuto y medio que me llevó leer la entrada porque tus mensajes me interrumpían :P
ResponderEliminarLa tecnología nos vuelve más psicópatas a todos.
Un besote.
Te falto lo decepcionante que es ponerle un tema en su muro, dos dias despues preguntar -ves tu muro vos!? Y que te digan sisi y que se hace con eso? SE LE PO NE ME GUS TA!!
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